Los vinos elaborados con el método de maceración carbónica son seña de identidad de Rioja Alavesa, vinos jóvenes, en los que prevalecen los aromas primarios, a uva, a fresca, a día de vendimia….
Pero antes de hablar sobre la elaboración, ¿desde cuándo existe esta técnica? En realidad, no es un método circunscrito a Rioja, así se elaboraban los vinos en España antes de la llegada de la filoxera, a finales del siglo XIX, quizás con alguna variación en función de cada región. Sin embargo, las primeras referencias de este tipo de vinos en nuestra zona datan de 1650.
Si bien, es cierto que hoy en día principalmente se elaboran vinos de maceración carbónica en Rioja Alavesa. Una ‘receta’ que habla del saber popular, de la transmisión de conocimiento de generación en generación, de nuestra cultura vitícola, un legado que en Bodegas Ostatu mantenemos con orgullo en nuestro vino Ostatu Tinto. Antiguamente, en Samaniego el barrio histórico de bodegas de Matarredo era protagonista.
Elaboración de vinos maceración carbónica
Para la creación de este tipo de vinos, los racimos se vierten enteros en depósitos de acero inoxidable. Las uvas de la parte superior ejercen presión sobre las de abajo, que poco a poco van soltando mosto. Debido a las levaduras presentes en la piel de las uvas, comienza la fermentación alcohólica, es decir, de forma espontánea.
Durante la fermentación alcohólica, se desprende CO2, lo que genera una atmósfera inerte en el depósito (ausencia de oxígeno). Es entonces cuando, en las uvas aún enteras, comienza una fermentación intracelular, esto es, dentro de cada baya. Las pareces de las uvas se rompen para poder liberar el C02 producido y se completa la fermentación.
Después, en el caso de Ostatu, el mosto-vino resultado se obtiene mediante pisado tradicional. El vino se conserva en el propio depósito hasta el embotellado.
Ostatu Tinto
Nuestro tinto más joven es una clara representación de la maceración carbónica de Rioja Alavesa. Está elaborado con 92% de tempranillo, 6% graciano y mazuelo, 2% viura, uvas que proceden de nuestras cepas más jóvenes.
A nivel aromático, el vino es un festival de frutas rojas frescas, como frutas, cerezas, moras y pétalos de flores. Además, el carbónico residual genera una sensación refrescante en boca, típico de los vinos de maceración carbónica. Estás características favorecen que estos vinos gusten a todo el mundo, son fáciles de beber y muy sabrosos, accesibles para todos los públicos. Debido a su elaboración, son los primeros vinos que salen al mercado habitualmente.
Beujolais Noveau
En Francia, al sur de la Borgoña, se extiende la región vinícola de Beaujolais, donde también son famosos los vinos elaborados con la técnica de maceración carbónica, pero, ese caso, con la uva gamay.
Todos los años, y siempre el tercer jueves de noviembre, se celebra una gran fiesta a nivel nacional, que se ha extendido a todo el mundo. Bajo el lema ‘Le Beaujolais Nouveau est arrive’ en las plazas y calles de la mayor parte de Francia se organizan catas y actividades para celebrar la llegada de los vinos más jóvenes de Beaujolais.
